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El dolor en el parto

Dolor en el parto

Una de las preocupaciones a las que se enfrentan las futuras madres, especialmente las primerizas, es el dolor en el parto. ¿Y si no aguanto el dolor?¿Epidural si o no? Hay mil pensamientos que se cruzan en la cabeza junto con otros miedos como: ¿Irá todo bien?, ¿Estará bien el bebé?, etc.

Informar a la mujer sobre este dolor, ayudará a gestionar esos miedos y dudas de cara al nacimiento. Saber sobre el funcionamiento de su cuerpo, su realidad anatómica, cómo su biología facilitará ese momento, entender que para él estamos programadas, y nuestro bebé sabe buscar ese canal de vida por dónde descender, etc.

Cuando una mujer se pone de parto las contracciones serán cada vez más frecuentes y dolorosas, muy diferentes a las de Braxton, que ocurren al final del embarazo. Afortunadamente nuestra fisiología es tan maravillosa que es capaz de reducir el dolor al mínimo que podemos tolerar.

Tipos de dolor en el parto

Digamos que para entenderlo un poco vamos a hacer una clasificación a cerca del dolor:

  • El dolor de las contracciones uterinas.
  • El dolor de tipo isquémico (por falta de llegada de sangre).
  • El dolor emocional,

El dolor de las contracciones uterinas

EL dolor de las contracciones uterinas es normal, legítimo e incluso interesante. Estas contracciones uterinas se encuentran presentes en todas las fases del parto, siendo intensas, dolorosas (más o menos dependiendo del umbral de la mujer) y regulares.

Cuando la mujer se pone de parto hay una bajada de progesterona en sangre, lo que conduce a un aumento de la síntesis de prostaglandinas resultado en un ablandamiento del útero. El cuerpo comienza a segregar oxitocina (quédate con este nombre) que es la hormona que genera las contracciones uterinas.

En este proceso se segregan catecolaminas, que nos induce a un estado de estrés fisiológico, un estado alterado de la conciencia que hace que la mujer está conectada con su sistema emocional y primitivo, somos mamíferas.

Digamos que el circuito sería el siguiente:

PROGESTERONA—PROSTAGLANDINAS—OXITOCINA

Conforme avanza el parto, este circuito se va reproduiendo, con aumento progresivo de la oxitocina y más contracciones del útero que produce un aumento del dolor, pero eh aquí la recompensa: nuestra oxitocina es cíclica, es decir, se produce dolor, aumentan las endorfinas y hay una fase de relajación entre cada contracción uterina. La mujer tiene tiempo para descansar, recuperarse y permitir la actividad de esas endorfinas.

«El parto nos induce a un estado de estrés fisiológico que hace que la mujer se conecte con su sistema límbico. Dolor no tiene que significar sufrimiento, tu cuerpo no va a darte más de lo que puedas tolerar»

Edurne Escalada

Quede claro que la oxitocina que nos inyectan no es cíclica: no existe ese circuito de recompensa entre contracción donde segregamos endorfinas y aquí nos encontramos con el primer problema de la oxitocina sintética, la abolición de nuestra propia biológia.

Como ves si que es cierto que el dolor de las contracciones uterinas es normal pero el sufrimiento no lo es, esto es opcional y te voy a explicar porqué:

El dolor isquémico

Se define como dolor isquémico a aquel producido por la falta de llegada de sangre. Esto ocurre por estar tumbada y se evita con el movimiento!! La mujer debe poder moverse durante el parto. Puede apoyarse sobre el lado izquierdo, permitiendo que el bebe se vaya hacia la izquierda descomprimiendo la vena cava. Al colocarse de lado LAS CONTRACCIONES SON MÁS INTENSAS PERO MÁS EFICACES, Además la hidratación, la respiración, el descanso y cierre de ojos durante las contracciones aliviará este dolor.

Durante el embarazo también podemos hacer por aliviar este dolor isquémico: alimentación correcta, hidratación, actividad física, ejercicios descongestivos a 4 patas, movilización de la pelvis, ejercicios del suelo pélvico, cuidar la postura, técnicas de relajación…

El dolor emocional

Tiene que ver con las emociones, creencias muchas veces erróneas y el miedo. Todas estas situaciones que rumiamos producen un incremento del tono muscular, una sobreestimulación del sistema nervioso y más dolor. ¿Cómo se puede evitar este dolor emocional? Pues fundamentalmente con información, lee libros que te ayuden a prepararte para ese momento, siéntete acompañada y amada, positiviza el entorno, verbaliza y mejora tu conciencia corporal, prepárate para el momento sobretodo desde el segundo trimestre.

Llegados a este punto… ¿epidural sí o no? pues realmente si es necesaria cuanto más tarde mejor. La epidural tiene contras ya que produce disminución de la contractilidad uterina, aumento del tiempo de trabajo de parto y a veces efectos neurotóxicos postparto. En cuanto al bebé se ha descrito que nacen más dormidos, les cuesta más la lactancia y pueden tener más posibilidades de padecer cólicos y reflujo.

Decidas lo que decidas, lo importante es que estés bien acompañada e informada de todas las decisiones que se tomen durante el proceso de parto. Si tienes cualquier duda, ¡ponte en contacto conmigo!. Estaré encantada de responderte.

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@edurne_escalada

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